Una nave extraterrestre llega a la tierra con la misión de entregar a los hombres un importante mensaje. El mundo entero queda conmocionado el día en que, sin previo aviso, un platillo aterriza en Washington y de él sale Klaatu, un alienígena de aspecto humano acompañado de Gort, un amenazante robot. La petición que Klaatu hace a todos los gobernantes del mundo es rechazada. Así las cosas, Klaatu decide observar cómo viven los humanos y, para ello, se hospeda en la casa de una mujer (Patricia Neal), madre de un chico, con el que Klaatu entabla amistad.

Una psicosis tangible entre una población temerosa de una posible Tercera Guerra Mundial con presencia de armamento atómico.
Realizada durante los primeros años de la Guerra Fría, la obra fue gestada bajo una óptica capaz de abordar con cierto compromiso uno de los asuntos más preocupantes de la sociedad de su tiempo: la amenaza nuclear.